Wednesday, May 30, 2007

Escribe Cesar Morielli

No sé cómo comenzar esta opinión. Lo digo abiertamente y sin pudores. Radio Atomika se distingue por esto también. Pero ya que hablamos de nuestra querida radio, tomo como disparador otra opinión propia difundida en el blog de nuestro amigo y colaborador Diego Vidal. El susodicho había escrito unas líneas reflexionando sobre victorias y derrotas, triunfadores y perdedores, utilizando la metáfora de dos tenistas: Roger Federer y Fillipo Volandri.

“Recuerdo un episodio, en Radio Atomika, que puedo enlazar con este comentario suyo. En plena visita de FM la 100 a nuestra plaza de San Martín, se formó el debate que suele producirse y repetirse hasta el cansancio en estos casos: las criticas al multimedio, los reclamos a la sociedad que no acompaña como creemos que debiera a nuestros emprendimientos, las puteadas al aire, el autobombo. Lo mismo de siempre. Y me alarmó darme cuenta que pensamos y decimos siempre lo mismo y cada vez con más pobres argumentos. Sin embargo recuperé un resquicio de esperanzas cuando me di cuenta que nosotros no entramos en esa pelea mediatico-cultural. Que somos tan pequeños que casi parecemos imperceptibles. Que somos tan insignificantes que no escribiremos la historia grande. Que no nos conoce nadie. Excepto, claro, aquellos que siempre hacen fuerza por Volandri o que votan al partido político perdedor solo por el respeto a sus convicciones. Sólo ese margen de la sociedad nos escucha. Y ese es nuestro triunfo, esa es nuestra esperanza. Un día al aire o un sólo oyente del otro lado del parlante son nuestras épicas y diarias victorias. No solo no somos perdedores, sino que ganamos todos los días, y en grande. Contra Federer o el Barcelona en el Nou Camp”.

Esta opinión puede disparar distintas sensaciones. Hoy me hace pensar que en la radio no somos grandes ilustrados del análisis ni pseudo filósofos o indispensables pensadores que salvaran a la humanidad toda (o casi toda) con sus reflexiones. No estamos ni cerca de acercarnos al nivel intelectual que necesitamos para producir un gran cambio. Ni cerca.

Pero no estamos lejos de hacer lo que queríamos con Radio Atomika. Quizás no sólo no estemos lejos sino qué (y esto es lo más probable y emblemático) en definitiva lo estamos haciendo. Somos nuestro sueño. Somos nuestro objetivo. Somos el camino que queremos recorrer.

Y luego de una extensa introducción (repito este concepto de que lo hago porque en Radio Atomika tenemos el lugar y la posibilidad de hacerlo como queramos) entramos en el tema pertinente que disparó el El Comandante Butera. A partir de esta situación y las críticas y reconocimientos que nos toquen, debemos pensar como queremos recorrer ese camino que estamos desandando. Cuidando una opinión azarosa, defendiendo y argumentando una crítica, pensando dos veces un chiste de mal gusto.

Sin juicios de valores: Atomika es el camino. Hay que cuidarlo y protegerlo, difundirlo y enriquecerlo. Sólo así nosotros seremos mejores y los oyentes estarán más satisfechos. Estamos haciendo historia con cada paso. Que cada quién ocupe el rol que le parezca, pero todos debemos sumar por el objetivo común.

Radio Atomika es la utopía hecha realidad. Por eso no debemos pensarla en paralelo con nada. Porque es incomparable y no se iguala con ningún otro proyecto similar por estos días. Así lo siento yo.

Entonces me cago en el multimedio. Nuestras agendas muchas veces coinciden, nuestra óptica casi nunca. Siempre estaremos distanciados porque defendemos valores que las frías reglas de mercado no contienen. Por eso conviviremos siempre al margen.

Humildemente...

César Morielli.
Conductor de La Culpa es Nuestra
Viernes de 20 a 22 Hs.